UN RECORRIDO POR NUESTRA MARCA
 

UN RESUMEN DE NUESTRA HISTORIA
 

La Historia de Galo comienza a principios de 1950, en el humilde y pequeño garaje
de una casa en Buenos Aires, con dos máquinas usadas, compradas con los ahorros de
varios años, comenzamos la fabricación de zapatos para niños.

Con el correr de los años, la fábrica fue creciendo tanto en infraestructura como en volumen y el
garaje fue quedando chico. Finalizada la década del 50´ Galo ya tenía su lugar propio y también había
empezado a elaborar zapatos de hombre de manera artesanal. 

Los años transcurridos entre los 60´ y los 80´ fueron años de aprendizaje, de muchísimo esfuerzo
y dedicación, para lograr la consolidación en la fabricación de zapatos para hombre.

A principios de los 90´ se produce un hito importante en la empresa ya que se incorpora
una nueva generación y con ella, comienza la búsqueda de desafiar muchos de los tabúes instalados en la sociedad.
Se trabajó largos años y de manera incansable, con errores y aciertos, con alegrías y frustraciones en la búsqueda de 
 

 “UN ZAPATO QUE SEA CÓMODO, BLANDO y LINDO,
QUE SE PUEDA USAR TANTO CON TRAJE COMO CON UN JEAN”

Con el nuevo milenio, Galo fue creciendo, tomando mayor relevancia y se convirtió en el diseñador y proveedor
numerosas marcas de renombre de Argentina aportándoles diseño y calidad a sus zapatos.
Se convirtió así, en líder en innovación, en tendencia, en calidad y en exclusividad de diseño.

En el año 2008 se produce otro importante momento en la Historia de la empresa, ya que fuimos pioneros
en la implementación de “la pátina”, que consiste en el patinado sobre los cueros de manera artesanal,
haciendo de cada zapato una verdadera obra de arte.

 

 

Ahora comenzamos esta nueva etapa, abriendo la fábrica directamente al consumidor final con la misma ilusión
de aquellos años 50´, sintiéndonos orgullosos de los productos que diseñamos, fabricamos y comercializamos,
orgullosos de nuestro oficio de toda la vida:

fabricar productos de alta calidad para nuestros clientes,
siguiendo las tradiciones de nuestros grandes maestros.